De los amores.
Llena de gracia, dijo…
Mordió este cuello,
Donde ahora pasea sus dedos,
¿Morirás conmigo?
Más sus ojos se pierden,
Hasta que su espanto me grita en la cara.
La vida me ha tragado en vida,
Dejando un boceto de mujer,
Entre tus piernas,
Entre tus dedos,
Entre tus pinceles,
Entre los girones de tu destino bermejo
Yo aquí sin el vestido,
Yo aquí,
Yo siempre,
Soy tu siempre,
Soy el fuego de tus días.
Tu adormecedora de soledades.
¡Los amores que matan!
Donde la pasión,
Te dibuja con su saliva en la espalda,
Los mensajes de la tristeza,
La desesperación, los celos,
Y me increpan como tu posesión.
Besos que desangran,
Más absoluta que Venus…
No me dejes, no me dejes,
Yo no te dejo semidiós,
Que solo se vuelve inmortal
Entre mis ganas y deseos.
Ya es tarde, ya lo desprendiste,
El ribete del desenfreno…
¿Morirás conmigo?
La vitrola que llora,
Los juguetes sin
cabeza,
SÍ… yo por ti muero… mi retazo de infierno.
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